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20 cosas que nos hicieron volver a creer en la moda en 2016 por Vogue.es

Hola|Hi|Aloha|Ciao|Salut| 你好 como ultima publicacion del año 2016 lo mas indicado seria compartirles este post “ 20 cosas que nos hicieron volver a creer en la moda en 2016″ segun Vogue.es el fin (definitivo) de los pitillo, el ‘slip dress’, los vestidos de noche con zapatillas… El resumen del año a través de los hitos estéticos más importantes

Adiós, pitillo; adiós

Adiós, pitillo; adiós
En 2016 han pasado muchas cosas: se han ido diseñadores de firmas importantes, otros han llegado para reemplazarlos, se pusieron de moda prendas que creíamos completamente olvidadas y empezamos a olvidar otras sin las que creíamos que no podríamos vivir, descubrimos nuevas chicas que nos inspiran en las fotos de street style y añadimos nuevas marcas al ranking de nuestras preferidas… Y todo, en apenas 12 meses. ¿Vértigo? Un poco, pero este ritmo voraz también ha servido para que volvamos a enamorarnos, sorprendernos y posicionarnos un poco. Y al final, de eso trata la moda, ¿no?
 
2016 será recordado por muchas cosas, pero sobre todo será recordado como el año en el que dejamos de llevar para siempre los vaqueros pitillo (o, al menos, deberíamos). Puedes elegir los cropped flared, de campana, los de corte boyfriend, los mom jeans… Los que quieras, pero dale un respiro a la silueta skinny. Y sobre todo hazlo convencida porque: A) No es la que más favorece y B) No es, ni de lejos, la más cool.

Otro tipo de belleza

Otro tipo de belleza
Hood by Air, Vetements, Birkenstock, Teva… Este año también ha sido el año para lanzarse a explorar otros tipos de belleza que nada tienen que ver con la clásica, objetiva y socialmente aceptada. En 2016 aprendimos a comprender lo raro, a apreciar lo insólito e incluso a amar, por qué no, la fealdad. Sí, así como suena. Y no es un gesto snob, ni la enésima vuelta de tuerca de un fashionista de manual, no. Es el advenimiento de una nueva era mucho más interesante y abierta en la que la belleza no es una cualidad pasiva que se tiene o no se tiene, sino que es un don que está en la manera de mirar.

Nuestras chicas (y nuestra marca) preferidas

Nuestras chicas (y nuestra marca) preferidas
Las estrellas del street style, como la energía, se transforman cada temporada y este año hay dos que han brillado con luz propia: Gilda Ambrosio y Giorgia Tordini. Son BBF, son complementarias (o te sientes identificada con Gilda –oscura y más trashy– o con Giorgia –clásica y sencillamente perfecta–) y, por si fuera poco, son las fundadoras de la marca más deseada de todo 2016: Attico. Este año hemos deseado todos y cada uno de sus kimonos con ademanes vintage y sus vestidos de terciopelo de inspiración Old Hollywood. Los queremos todos y las queremos a ellas.

Hedi, te echamos de menos

Hedi, te echamos de menos
En 2016 también hubo juego de tronos para rato: Maria Grazia Chiuri dejó Valentino y llegó a Dior, Raf Simons aterrizó en Calvin Klein y Bouchra Jarrar hizo lo propio en Lanvin… Pero de todos los movimientos sísmicos del mundo de la moda hubo uno que nos partió especialmente el corazón: la salida de Hedi Slimane de (Yves) Saint Laurent. El diseñador llegó a la maison francesa, la revolucionó, la rejuveneció, la convirtió en una máquina de súper ventas y se marchó en lo más alto de la fiesta, como hacen los mejores. Ahora le imaginamos en Los Angeles fotografiando sin parar a skaters en Echo Park y acudiendo a los conciertos de todos los grupos que-hay-que-escuchar-ahora. Pero por qué no decirlo, también nos lo imaginamos al frente de Chanel poniéndolo todo patas arriba de nuevo y se nos pone la piel de gallina solo de pensarlo.

Los vestidos de noche ya nunca más se llevarán con zapatos de tacón

Los vestidos de noche ya nunca más se llevarán con zapatos de tacón
Foto: © Diego Anciano / @collagevintage2
Este año también ha sido el de la gran revolución del high & low, o lo que es lo mismo, este año perdimos el miedo a mezclar con mayúsculas y a vestir de manera un poco especial un día cualquiera. Veronika Heilbrunner ha tenido mucho que ver en ello: fue ella la que nos enseñó que podemos llevar diseños de noche con unas Converse All Star, que los looks de invitada pueden tener una segunda vida mucho más casual y que los vestidos largos no tienen que ir con zapatos de tacón necesariamente. Y nos convenció de todo, claro.

El futuro (¡por fin!) es nuestro

El futuro (¡por fin!) es nuestro
Foto: © Getty Images
Maria Grazia Chiuri firmó el mensaje de la temporada. Y lo hizo de la manera más mediática y más sencilla posible: estampando un inequívoco We should all be feminists en una vulgar camiseta en su debut en la casa Dior. Toda una declaración de intenciones que tiene mucho que ver con que ella es la primera mujer al frente de una de las firmas de moda más icónicas de todos los tiempos, pero también una prueba más icónicas de todos los tiempos, pero también una prueba más del signo de nuestro tiempo: #TheFutureIsFemale. Ahora sí, amigas, ha llegado nuestro momento y no vamos a dejar pasarlo de ninguna manera.

La prenda clave del año (y puede que también del que viene)

La prenda clave del año (y puede que también del que viene)
Foto: © Miguel Reveriego / Realización: Belén Antolín
El slip dress llegó sin hacer mucho ruido, casi de manera accidental, como si solo pasara por allí aprovechando el revival 90´s que proclamaba la moda. Pero luego fue ganando terreno, encontrando nuevas mezclas (con camisetas debajo, incluso); y disfrutando de una vida mucho más allá del grunge y de la cultura teenager hasta convertirse en el nuevo LBD (pero sin la exigencia del largo y el color). Y ahora que el año acaba hemos descubierto que no podemos vivir sin él y este enamoramiento no tienen tintes de acabarse en 2017…

Mucho más que un ángel

Mucho más que un ángel
Foto: © Cordon
2016 también fue el año que descubrimos a Elsa Hosk, al menos estilísticamente hablado. El ángel de Victoria’s Secret es también un auténtico filón de looks off duty y no con una estética súper sexy, como quizá cabría esperar (las alas pesan mucho en el imaginario colectivo), sino más bien todo lo contrario. La top es una maestra a la hora de mezclar estampados, de combinar tejidos y de reeditar los accesorios que todas queremos (como las gafas de Kurt Cobain o los mocasines peludos de Gucci). Elsa nos hace tocar el cielo incluso cuando no desfila para la mítica firma de lencería.

Pasos de baile

Pasos de baile
Foto: © Miguel Reveriego / Realización: Belén Antolín
Otra de las obsesiones que más nos ha perseguido durante los últimos 12 meses ha sido el ballet: ha vuelto el tul, ha vuelto el body, han vuelto las zapatillas para bailar (¿de verdad hay alguien a estas alturas que no adore las de Miu Miu con las cintas de cuadros de Vichy?), ha vuelto el recogido pulido… Y al margen de consideraciones sobre el uso que se hace de su estética (que la tiene y que trasciende al ballet per sé), lo cierto es que su fragilidad, su ligereza y su feminidad no pueden ser más inspiradoras.

We ♥ Gucci

We ♥ Gucci
Foto: © Diego Anciano / @collagevintage2
Este año nuestro amor por Alessandro Michele/ Gucci no hizo sino crecer y madurar: pasamos del flechazo absoluto de 2015, al romance consolidado y sin dobleces de 2016. Pero seguimos sintiendo las mismas mariposas en el estómago cuando vemos sus desfiles, suspiramos profundamente cuando llegan las nuevas imágenes de sus campañas publicitarias y coleccionamos mentalmente imágenes de sus bolsos surrealistas, sus mocasines alocados y sus vestidos extravagantes. Lo nuestro es amor eterno.

La chica que todas queremos ser

La chica que todas queremos ser
Foto: © Diego Anciano / @collagevintage2
A principios de este año fichamos a una chica en el street style que nunca antes habíamos visto: llevaba camisas masculinas extragrandes que se le escapan por debajo de faldas vaqueras súper mini, llegaba a los desfiles con camisetas de bandas de rock que se intuían usadas de verdad, mezclaba prendas de Vetements con otras súper sexies para conseguir el look más cool que se pueda imaginar… Patricia Manfield, cantante y recién estrenado icono de estilo, se ha convertido en apenas un año en una fuente inagotable de trucos de estilismo copiables y deseables a partes iguales. Ya solo deseamos que llegue febrero para volver a ver con qué nos soprende durante las semanas de la moda.

Llegó, vio y venció (a nuestro pesar)

Llegó, vio y venció (a nuestro pesar)
Foto: © Icíar J. Carrasco
onald Trump anunció su candidatura y contra todo pronóstico (o no) ganó las elecciones presidenciales de Estados Unidos. Entre medias desató una ola de activismo contraria a su campaña que alcanzó también al mundo de la moda: diseñadores, modelos, celebrities, artistas… Todos se lanzaron a pedir el voto a favor de cualquier candidato distinto al magnate en sus redes sociales. Incluso Vogue.com abandonó temporalmente su neutralidad para apoyar públicamente a Hillary Clinton. Pero de nada sirvió… Y, aunque tengamos por delante 4 años que se anticipan extraños, al menos hemos constatado que la industria no es tan frívola, tan indolente y tan snob como algunos se empeñan en creer.

Simplemente Sarah

Simplemente Sarah
Foto: © Diego Anciano / @collagevintage2
A Sarah Harris ya la conocíamos antes, pero 2016 ha sido el año en el que hemos confirmado que es nuestro icono absoluto de mujer a los 40: queremos esa melena plateada, queremos vestir (casi) siempre de negro, queremos abrazar el minimalismo (y prescindir incluso de bolso) y queremos vestir con esa mezcla de espíritu tomboy y elegancia silenciosa y súper sofisticada.

El año que soñamos con ser ‘skaters’

El año que soñamos con ser 'skaters'
Foto: © Icíar J. Carrasco
La iconografía skater ha sido una de las más copiadas, revisitadas, reinterpretadas y deseadas de la historia de la cultura urbana. Pero este año ha sido es de su (re)descubrimiento total y lo ha sido, principalmente, gracias a las modelos que han consagrado sus looks off duty a las sudaderas XXL de Thrasher (por mucho que le pese al director de la revista), a las zapatillas Vans, a los pitillo oscuros y a las gorras de Supreme. En 2016 todos hemos fantaseado con hacernos pasar por uno de ellos (y casi lo hemos conseguido).

¿La mejor camisa? La de él

¿La mejor camisa? La de él
Foto: © Icíar J. Carrasco
La camisa siempre ha sido una de las prendas más perfectas que existen, en 2016 y en cualquier otro año, pero en éste la prenda ha adquirido proporciones épicas, literal y figuradamente hablando: las camisas han ensanchado sus costuras, han aumentado sus proporciones y se han llevado superpuestas, giradas, con las mangas atadas, con los botones abiertos para abrir el escote… De todas las maneras posibles, pero siempre masculinas y oversized, eso ha sido innegociable. En 2016 la mejor camisa fue la él.

El debut más difícil de todos

El debut más difícil de todos
Foto: © Getty Images
Pocos debuts han despertado tanta expectación como el de Anthony Vaccarello al frente de Saint Laurent en septiembre de este año. El diseñador recibió un regalo tan irresistible como envenenado: el liderazgo de una casa en su punto más álgido de creatividad, de ventas y de imagen. ¿Qué posición adoptar? ¿Continuista? ¿Rupturista? Vaccarello optó por el camino intermedio –el más seguro de todos–: rescató el legado original (logo incluido) y se lo llevó a su terreno sexualizado y dark. Y funcionó, aunque la grúa con el ‘Yves’, el borrón de toda la época Slimane en redes sociales y los litigios legales entre el ex director y la maison hayan revelado que ninguna ruptura es tan civilizada como parece.

El escote que todas –pero todas– hemos llevado

El escote que todas –pero todas– hemos llevado
Foto: © Josefina Andrés / Realización: Miriam Mira
Se ponen de moda prendas, siluetas, tejidos, estampados… Pero, ¿escotes? En 2016 aprendimos que sí, que también ellos pueden ponerse de moda. Quizá por eso el más ubicuo del año ha sido el off the shoulders, o lo que es lo mismo, el escote barco reinventado (o no) con tirantes más o menos finos. Y lo cierto es que favorece, es súper femenino y desprende un sexy edulcorado al que es muy difícil resistirse,

El año de Loewe

El año de Loewe
Foto: © Cortesía de Loewe
Fichar a JW Anderson como director creativo fue una decisión controvertida: Loewe es una firma clásica vinculada a la marroquinería y el diseñador inglés es un talento vanguardista, subversivo casi, con una concepción del lujo que es cualquier cosa menos tradicional. Aquello podía ser un choque de trenes… O una auténtica catarsis, que fue lo que realmente terminó siendo. Anderson ha reeditado la herencia de la casa modernizándola sin titubear y creando iconos que miran al siglo XXI. Este año, para celebrarlo, la firma organizó una exposición en Madrid e inauguró Casa Loewe, un espacio de encuentro entre la filosofía de la marca y los amantes de la moda. Porque, a veces, las relaciones más inesperadas son también las más fructíferas.

El ‘clutch’ más humilde (y también el más bonito) del mundo


El 'clutch' más humilde (y también el más bonito) del mundo
Foto: © Soren Jepsen / TheLocals
Que los capazos son uno de los bolsos más recurrentes del verano no es ninguna novedad, pero lo que sí que no había ocurrido hasta la fecha es que redujeran sus dimensiones hasta confundirse con un clutch para convertirse también en los más sofisticados. Sí, como lo lees, sofisticados. Las cestitas mini irrumpieron para rematar looks de street style pero también de invitada y lo mejor es que no parecen dispuestas a desaparecer ahora que llega el invierno.

Vuelve (¡oh, sí!) el fuseau

Vuelve (¡oh, sí!) el fuseau
Foto: © Diego Anciano / @collagevintage2
 ¿La peor de tus pesadillas? Puede, pero recuerda, Keep calm and carry on. No va a ser la primera vez que termines llevando algo a lo que te habías negado rotundamente en un principio. Y aunque el fuseau tiene muchas posibilidades de estar en esa lista negra, basta con ver las versiones 2.0 para darse cuenta de que no es tan descabelleado rescatarlos.